miércoles, 1 de diciembre de 2010

Pocas actrices jóvenes con el talento de Natalie Portman han tenido una carrera tan bien pensada, íntegra, cuidadosa

Fue tan precoz como madura. . No exponiéndose más de la cuenta, sin perder su vida privada y dejando espacio para estudiar. http://nataliaportman.blogspot.com/

“Yo no pretendo ser actriz cuando mayor, quiero hacer otras cosas”. Todas las declaraciones de esta chica que debutó a los 12 años en el cine suenan a una seguridad y claridad casi insoportables.

La más matea del curso, Natalie Hershlag nació en Jerusalén 29 años atrás. Hace rato ya que dejó de ser la niña que asombró al mundo entero por su arrollador debut en la pantalla grande cuando pequeña en El Perfecto Asesino (1994), de Luc Besson, junto al actor Jean Reno.

La niña era preciosa. Actuaba increíble. Y además se convertía en la protegida de un asesino a sueldo que le enseñaba el oficio. Hay muchas niñas que se llaman Matilda por este personaje. Como la hija del Pollo Valdivia y la Claudia Conserva.

Desde entonces, Natalie se convirtió en centro de atención de hordas de cinéfilos que veían en ella una suerte de encarnación de la fantasía de la niña más linda e inteligente de la cuadra. La que mirábamos –sin atrevernos a hablarle– cuando íbamos al colegio o paseábamos en bicicleta.

Sus padres se preocuparon por el tema. Ella también. Por eso hicieron sacar del guión una escena de desnudo, y lo mismo harían después en Cambio de Vida. Los productores iban a reemplazarla, pero su madre en el filme, Susan Sarandon, dijo que si Natalie no estaba en la película, ella tampoco.

Más adelante rechazaron que participara en la nueva versión de Lolita, que hizo Adrian Lyne en 1997. “No creo que sea necesario que haya una película dónde un niño tiene relaciones sexuales con un adulto (…) Pienso que ya hay bastante explotación por ahí”. A los 15 años tenía las cosas más que claras.

Hablaba como grande. Se expresaba tan bien. Por ejemplo, decía: “Es horrible ser un objeto sexual a cualquier edad, pero por último cuando eres un adulto puedes decidir si quieres degradarte a ti mismo (…) Los actores jóvenes no piensan en las consecuencias de hacer escenas explícitas de desnudo o de sexo. Ellos tienen tantas ganas de conseguir un papel que aceptan ser explotados y entonces terminan avergonzando a su familia, amigos e incluso a extraños”. Cómo tan clever.

Descubierta a los 11 años en un local de pizzas, querían convertirla en modelo, pero ella prefirió actuar. Sus siguientes trabajos fueron papeles secundarios en películas importantes, con grandes actores, de directores respetados. Fue la hija de Al Pacino en Fuego contra Fuego, de Michael Mann, y trabajó con Tim Burton (Marte Ataca) y Woody Allen (Todos Dicen Te Quiero).

Ella misma confiesa que durante los rodajes, el resto de los actores la trataban como una adulta. Pero que al parar la filmación, mientras los demás se iban a su tráiler a beber un trago o a carretear, ella tomaba clases particulares. Siempre dijo que no iba a dejar los estudios. Que le parecía que estaba dando un buen ejemplo al entrar a la universidad.

Entró a estudiar Psicología en Harvard y dejó de lado la fama y la exposición de Hollywood. Y aunque no dejó el cine como había dicho, lo relegó a la época de las vacaciones. Hizo poquitas películas, pero son las más taquilleras que ha hecho. Aceptó la invitación de George Lucas para estar en la nueva trilogía de La Guerra de las Galaxias, como Padme Amidala, la mamá de Luke y Leia. Aunque ella nunca había visto las películas originales. Claro, andaba ocupada leyendo a Heidegger y Foucault, suponemos.

Vegetariana desde los 8, judía no religiosa (dice que le han mandado cientos de guiones sobre el Holocausto), habla varios idiomas: inglés, hebreo, francés, alemán, japonés y algo de español. Ha hecho teatro en Broadway y a su rol de actriz ahora suma el de productora y directora. A pesar de todo lo que anunció que iba a dejar el cine y se iba a dedicar a cosas más serias. Ahí está. Llena de proyectos y sin asomo de querer parar. Por suerte.

El día en que me topé con ella

Fue en un hotel de Nueva York, en un típico junket de prensa. Donde las compañías reúnen a periodistas del mundo para hacer entrevistas promocionales. Fox lanzaba varios filmes, entre ellos Where the Heart Is, con la Portman. Pero como no se estrenaría en Chile, no había entrevista. Así que fue sólo un encuentro fugaz. La vi tomando el ascensor. Fue de pasadita. Pero igual se veía excelsa. Perfecta, la muy maldita.

Beautiful girls

Su rol de la vivaz adolescente en Beautiful Girls consolidó su fama de ninfa guapa e inteligente. En una parte de la cinta, Paul (Michael Rappaport) le dice a Will (Timothy Hutton): “Una chica hermosa puede causar mareos (…) Esta aura particular se puede encontrar en la marcha de una hermosa niña. En su sonrisa, en su alma, en la forma en que hace que cada pequeña podrida cosa en la vida parece que va a salir bien”.

Futuro profesional

Ahora llega a la cartelera con Hermanos, en un triángulo con Jake Gyllenhaal y Tobey Maguire. Estará en el Festival de Venecia con Black Swan, de Darren Aronofsky (El Luchador), junto a Winona Ryder, y el próximo año viene en Thor, una de superhéroes, que dirige Kenneth Branagh. Además será productora y protagonista de Orgullo, Prejuicio y Zombies, una mezcla de Jane Austen y muertos vivientes.

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